El 857 estaba equipado con la versión de mayor cilindrada del legendario motor de cuatro cilindros en línea que comenzó su carrera con las victorias en el Campeonato del Mundo de 1952 y 1953, y que fue posteriormente subido a 3 litros, manteniendo las mismas dimensiones externas del bloque.
Las poquísimas unidades del tipo 857 S construidas sirvieron de base para el desarrollo de su sucesor, el tipo 860 Monza, que se diferenciaba de éste en ciertos detalles técnicos, como el número de marchas (cuatro en lugar de cinco) y la forma de su majestuosa carrocería Scaglietti.