Nuevo impulso al motor V12 de Gioacchino Colombo que llegaba a los 2.562,51 cc. Hubo que construir un nuevo chasis, con un tren de rodaje más rígido que fuera capaz de soportar los 150 CV del motor. Con el 212, Vittorio Marzotto ganó la Targa Florio y el equipo Taruffi-Chinetti terminó primero en la Carrera Panamericana.