Con una tecnología digital tan vanguardista que aún no se ha visto en ningún otro complejo LEGOLAND, el LEGO Ferrari Build and Race es una experiencia totalmente personalizable que ofrece a los visitantes la oportunidad de modificar el motor, los neumáticos, la potencia y la aerodinámica de su automóvil. 

Hasta pueden personalizar su propia matrícula. Una vez realizada la adaptación, los coches se escanean digitalmente y comienzan las carreras virtuales, incluida la oportunidad de marcar el mejor tiempo en el circuito de Fiorano de Ferrari en Maranello. 

El Ferrari F40 original se fabricó en 1987 para celebrar el 40.º aniversario de Ferrari y fue la última presentación de un coche nuevo a la que asistió Enzo Ferrari antes de su muerte. Su chasis ligero y su motor V8 biturbo impulsaban la berlinetta biplaza de 0 a 100 km/h en 4,1 segundos y le permitían alcanzar los 324 km/h, una velocidad inédita para un coche de producción en aquella época.

Diseñado según la filosofía de la «máquina extrema» fundada por su predecesor, el GTO, el F40 solo tardó once meses en conceptualizarse, construirse y entregarse, lo que en cierto modo es un récord para un superdeportivo. En comparación, el F40 de LEGO requirió más de 1800 horas de desarrollo por parte de un equipo de diseñadores y constructores, y otras 1900 horas para fabricar el deportivo de ultralujo y altas prestaciones en su famoso color rojo Ferrari. 

Desde el punto de vista de la construcción, el verdadero F40 de 1988 tenía un enfoque espartano. Con una gran unidad frontal única y una sección trasera desmontable, en la carrocería solo había once paneles, mientras que el interior era tan austero que incluso el pestillo de apertura de la puerta era un cable de tracción en los escuetos compartimentos de las puertas. La versión LEGO tiene unas dimensiones similares a las reales: 14 pies de largo, más de seis pies de ancho, cuatro pies de alto y una distancia entre ejes de ocho pies.