Chris Rees

Ferrari ha elegido el Salón del Automóvil de Ginebra para lanzar más de 40 nuevos modelos en todos estos años. Vamos a repasar algunos de los debuts más significativos y espectaculares

1953 - Ferrari 250 MM

El primer Ferrari que se presentó en el Salón del Automóvil de Ginebra fue verdaderamente glorioso. El 250 MM se basó en el prototipo del Ferrari 250 S de 1952, ganador de la Mille Miglia, y de ahí nació el modelo de producción en 1953 que se llamó "MM" como el épico rally de carretera. Utilizó el nuevo motor V12 de 3 litros diseñado por Gioachino Colombo, que demostró su rendimiento en la Mille Miglia y en muchos otros eventos. Bajo los focos de Ginebra, su elegante carrocería coupé Pinin Farina abrió nuevos caminos en el mundo del diseño.

1957 - Ferrari 250 GT Cabriolet

Los descapotables Gran Turismo no figuraban en el catálogo de Ferrari antes de 1957, porque se dejaban en manos de carroceros como Boano (que expuso en Ginebra un Cabriolet del 250 GT en 1956). En el Salón de Ginebra de 1957, el 250 GT Cabriolet, diseñado por Pinin Farina, dio paso a una nueva era y se convirtió en un modelo "oficial" de Ferrari. Clásicamente elegante y con unas proporciones maravillosas, representaba el auge del estilo refinado de los años cincuenta.

1984 - Ferrari GTO

Superficialmente, el GTO que se presentó en el Salón del Automóvil de Ginebra en marzo de 1984 podía parecerse al contemporáneo Ferrari 308, pero su exterior elegantemente curvilíneo escondía la fiera que llevaba dentro. Aunque queda plenamente justificada su legendaria insignia 'GTO', estuvo a punto de ser un coche para rallies de carretera, como lo demuestra el uso de materiales compuestos ligeros y la suspensión adaptable. Su motor de 2,8 litros y ocho cilindros (que extraoficialmente le prestó el prefijo "288") tenía dos turbocompresores y una potencia máxima de 400 CV, algo extraordinario para aquella época.

1994 - Ferrari F333 SP

Los coches de competición suelen presentarse lejos del esplendor y el glamour de los salones del automóvil, pero el F333 SP fue diferente. El último de la gama de los Ferrari de ruedas cubiertas se presentó en Ginebra en 1994. En un plazo de 12 meses, el mismo coche que estuvo expuesto en el stand de Ginebra llegó a triunfar en la carrera de las 12 Horas de Sebring. Las guirnaldas de la victoria caerían como hojas sobre el F333 SP durante su trayectoria deportiva, que consistió espectacularmente en 47 victorias internacionales y 12 campeonatos. Sin duda, lo más destacado fue la victoria en la carrera de las 24 Horas de Daytona de 1998.

1995 - Ferrari F50

¿Qué mejor manera de celebrar el 50 aniversario de Ferrari que hacer el ultra deseable F50? En realidad, el F50 llegó algo prematuro para ese 50 aniversario de oro, al presentarse en el Salón del Automóvil de Ginebra el mes de marzo de 1995. Fue lo más parecido a un coche de Fórmula 1 que Ferrari fabricara hasta la fecha, adoptando una construcción, materiales y aerodinámica con el estilo de la F1. Sus estrictas especificaciones técnicas no contemplaban ninguna asistencia de servodirección ni de servofreno, mientras que su motor V12 de 520 CV ofrecía unas prestaciones inigualables.

1999 - Ferrari 360 Modena

Una nueva era para las berlinettas V8 Ferrari con motor central llegó en el Salón de Ginebra de 1999 con el 360 Modena. Esa fue la primera producción que hizo Ferrari con todas sus partes principales (chasis, carrocería y suspensión) en aluminio. Se eligió Ginebra para presentar el 360 Spider (en 2000) y el 360 Challenge Stradale (2003).

2013 - LaFerrari

Ginebra 2013 fue la ocasión ideal para lanzar el primer coche híbrido de Ferrari. Y qué máquina tan espectacular era el LaFerrari: su grupo motopropulsor de gasolina/eléctrico de 963 CV era el más potente de la historia en un coche de carretera Ferrari y su tecnología inspirada en la F1 lo convirtió en el superdeportivo más avanzado (y deseable) del mundo.

2018 - Ferrari 488 Pista

Después del debut en Ginebra del 488 GTB en 2015, Ferrari volvió a elegir el Salón del Automóvil suizo para presentar su último coche de la 'Special Series', el 488 Pista. Con su motor V8 turbo de 720 CV, sus piezas especiales ligeras y su aerodinámica derivada de la F1, es lo más parecido a un coche de pista que se puede conseguir en un Ferrari de carretera.