Pasión
Esos errores que no deben olvidarse
Enzo Ferrari dijo una vez que «el segundo es el primero de los perdedores». Su objetivo era la victoria y nunca trató de ocultarlo, creyendo siempre que la victoria más importante no era la más reciente, sino la siguiente. Nadie sabía ver lo positivo de las derrotas y las dificultades como Enzo. Para él, eran lecciones valiosas que ayudaban a la Scuderia a crecer, mejorar y alcanzar la cima.
Desde el «prometedor fracaso» de su 125 S en su primera carrera en Piacenza —que, de hecho, ganó en Caracalla inmediatamente después— hasta el «armario de los errores», donde el fundador recogía todos los componentes mecánicos averiados para estudiarlos, entender por qué fallaban y asegurarse de que el mismo error no volviera a ocurrir.
En el aniversario de su muerte, el 14 de agosto de 1988, queremos recordarle así: un hombre con un deseo incansable de victoria, cuyo éxito no se ganó en caminos rectos y fáciles, sino en aquellos que planteaban los mayores desafíos de todos.
Vea nuestro homenaje a Enzo Ferrari, 37 años después de su fallecimiento